miércoles, 8 de octubre de 2008

CERN

Hay días, los que menos, que resulta maravilloso leer la prensa por la por la mañana.
Hay días en los que te das cuenta que hay gente estupenda, inteligente, que habla como es debido y que le gusta lo que hace. Y hay días, además, que esas personas animan al resto del mundo a pensar que los cambios son posibles y que las perspectivas de futuro pueden variar.
Mar Capeans es la única española en el staff (me encantan los anglicismos...) científico del CERN, el Laboratorio Europeo de Física de Partículas (creo que no habría otro sitio mejor para que yo me sintiera más perdida...), dónde nació el acelerador de partículas, eso que nos hizo creer hace un mes que el mundo se podría acabar en menos de nada.
Pero además de las reflexiones físicas- que he tenido que leer un par de veces cada una para entenderlas bien- lo que más me ha gustado ha sido el mensaje que transmite al final: no tiene que haber paridad por ley, sino que las niñas descubran a mujeres en puestos de responsabilidad para que vean que es posible, pero cuando estas mujeres se lo merecen... Porque seguro que ni a Mar, ni a ninguna otra, le hace gracia que se encuentre en el mismo puesto que ella otra mujer que no ha tenido que esforzarse, sino que esté ahí sólo por el hecho de ser mujer. Bendita gilipollez.

3 comentarios:

lexu-jaime dijo...

Estoy deacuerdo con la investigadora.

Y supongo que a la ministra de igualdad no le habrá echo mucha gracia esta perspectiva ya que para su cargo, lo que es meritos no parece haber echo muchos.

Su guapa dijo...

Ella es hija de alcalde socialista, criada entre los brazos de Bono (literal) y toda la cúpula socialista del más rancio abolengo... y básicamente ser de Cádiz y tener mucho arte... tela, tela...

hemoscaido dijo...

A uno, lo que más le gusta de la Capeans es eso de que haya conseguido que en los bares se hable de positrones. Uno intenta hoy que se hable de proteínas resistentes. Viva la divulgación de la ciencia, que nos da de comer en tiempos de crisis. Uno, intentando ser optimista.